*La propuesta es en reconocimiento a su destacada trayectoria literaria, periodística y a su compromiso social
/La Redacción
CDMX, a 15 de octubre de 2025.- La senadora Beatriz Mojica Morga,
presidenta de la Comisión de Cultura del Senado de la República, informó que
avanza la proposición con punto de acuerdo en la que se solicita que la Sala de
Comparecencias del Senado de la República lleve el nombre de Elena Poniatowska
Amor.
Explicó que, en la sesión ordinaria vespertina del 14 de
octubre, se dio turno directo a la Comisión de Cultura para su análisis y
dictamen.
Esta es una propuesta conjunta de la presidenta de la mesa
directiva, Laura Itzel Castillo Juárez y de la senadora Beatriz Mojica Morga.
La legisladora guerrerense explicó que la proposición exhorta
a la Mesa Directiva del Senado de la República a declarar la Sala de
Comparecencias como “Sala de Comparecencias Elena Poniatowska Amor”, en
reconocimiento a su destacada trayectoria literaria, periodística y a su
compromiso social.
Mojica Morga citó la proposición, la cual busca honrar a
Elena Poniatowska, pues representa un acto de justicia y reconocimiento, además
de un recordatorio permanente del papel que la cultura, la crítica social y el
periodismo comprometido desempeñan en el fortalecimiento de la democracia y la
conciencia social.
Elena Poniatowska es una figura esencial de la memoria
colectiva de México. Su voz ha acompañado las causas populares, los movimientos
sociales y la defensa de los derechos humanos; colocar su nombre en uno de los
espacios más representativos del Senado es rendir homenaje a su vida y legado.
En la exposición de motivos, detalló Mojica Morga, se marca
que Poniatowska es una de las más grandes exponentes de las letras mexicanas
contemporáneas, autora de obras emblemáticas como La noche de Tlatelolco, Hasta
no verte, Jesús mío y Tinísima, entre muchas otras.
Asimismo, han sido reconocidos sus aportes al periodismo y la
cultura con premios nacionales e internacionales, entre ellos el Premio
Cervantes (2013), el Premio Rómulo Gallegos (2007) y el Premio Alfaguara de
Novela (2001).
La propuesta de las dos legisladoras establece también que,
una vez aprobada, se coloque una placa alusiva con el nuevo nombre y una reseña
de su trayectoria, así como la organización de un acto solemne para la
develación de la misma.