Yo, ciudadano
/Gustavo Martínez Castellanos
Acapulco; Guerrero, a 12 de mayo de 2025
La presidenta Claudia Sheinbaum visitó Acapulco este viernes
09 de mayo. En esta ocasión, se anunció que venía a supervisar los avances de
la reconstrucción del puerto con base en los planes que, según se dijo, se iban
a echar a andar la vez anterior que vino.
Sin embargo, no hay avances de nada, de hecho, ni siquiera
está terminado el hospital de especialidades que dijo que iba a venir a
inaugurar en su siguiente visita, es decir, esta
De esa forma, resulta rara la escala en su agenda llevada a
cabo este 09 de mayo.
Sin embargo, no es el único evento extraño en lo que va en
torno de esta nueva presencia de la Ejecutivo federal a nuestro puerto.
El primer evento fuera de lo común fue la declaración del
dirigente estatal de MORENA en torno al terrible linchamiento tanto mediático
como político que estaba sufriendo la alcaldesa de Acapulco, Abelina López.
Desde que se anunció que se estaban preparando dos juicios
contra ella, uno Político y otro Revocación de mandato, tanto la prensa como
los actores políticos de MORENA no dejaban de publicitar sus opiniones. En el
caso de la prensa fue a través de los analistas de cada medio y en el caso de
los políticos, a través de declaraciones muchas veces a modo en las que los
señalamientos apuntaban a que Abelina era un elemento nocivo que tenía muchos
negativos en su administración, el más grande, no responder por el paradero de
una enorme suma de dinero.
Este tsunami contra la alcaldesa tenía un flujo
ininterrumpido de varias semanas. Todos los días encontrábamos en las redes
pronunciamientos y quejas, análisis basados en especulaciones y anuncios de
hallazgos de más pruebas de corrupción.
Ante tal maremágnum, en este mismo espacio señalé que dicho
linchamiento no beneficiaba a nadie en Guerrero, salvo al grupo de los Salgado
(Félix y Evelyn) que, de esta forma, es decir, eminentemente mediática,
desprestigiaban a la alcaldesa y la satanizaban de cara a los comicios de 2027
donde los guerrerenses elegirán gobernador.
Anterior a esto, señalé que la actitud de ambas funcionarias
de participar por separado en el Tianguis turístico en Baja California daba
señales claras de que en MORENA no había orden ni había unidad y, que,
actitudes como esa dañaban la imagen de Guerrero en un evento en el que se
vende precisamente eso: imagen.
Establecido todo esto, como algunos de los eventos más raros,
vayamos al que considero más importante: la advertencia del dirigente estatal
de MORENA de que las denuncias presentadas a la Cámara de diputados local por
un ciudadano llamado Ramiro contra Abelina no tendrían eco en MORENA, porque
Ramiro es priista y por lo tanto era enemigo de MORENA y, por lo tanto, MORENA,
como partido, “no iba a hacerle el caldo gordo”.
La infantil advertencia logró, de forma casi automática, el
cese de la palabrería hostil contra la alcaldesa
Ese miércoles 07 de mayo, como decía José Alfredo: “los
mariachis callaron” y hasta hoy no han vuelto a hacer ruido. Ni una sola
mención a las faltas de la alcaldesa.
Tal silencio no es milagroso ni mucho menos una muestra de
músculo del funcionario morenista, tal silencio se debe a que la presidenta Sheinbaum
iba a visitar Guerrero dos días después, el viernes 09, y el morenismo suriano
tenía que limpiar la casa para recibirla.
Ese ejercicio subrepticio de limpieza tampoco es obra del
presidente estatal de morena sino del enorme poder que ostentan los Salgado.
Un poder tan grande que les permite tirar la piedra y
esconder la mano y aunque haya testigos éstos no dirán nada. Absolutamente
nada.
No sólo es un poder político y territorial, también es un
poder económico capaz de comprar lo que sea en Guerrero, gente, grupos, jueces,
sindicatos, universidad, conciencias y silencio.
Por ello, la estridencia del linchamiento contra Abelina, y
también por ello, la rapidez para acallar ese linchamiento.
Esas reacciones de este neo cacicazgo nos hacen entrever que
la presidenta Claudia Sheinbaum no vino a Acapulco a supervisar nada sino a
poner orden.
Nuevamente, como al inicio de su sexenio, vino a advertir a
ambas funcionarias que en su gobierno no va a permitir este tipo de desafueros.
Esto no significa que esté del lado de Abelina o de Evelyn,
sólo significa que, a dos años de distancia de las próximas elecciones en
Guerrero, su gobierno no va a correr el riesgo de pasar por fracturas o
divisiones basadas en caprichos o en juicios amañados en los que no sólo se
dañe la reputación de Abelina sino la de todo MORENA.
De esa forma, ya se puede ver que las querellas contra
Abelina van a ser revisadas con especial cuidado y que si se llega a encontrar
delito alguno lo más probable es que se aplique una sanción mediana o mínima, y
si no se encuentra delito alguno se hará saber sin tapujos.
De entrada, la presidenta invitó a Abelina a acompañarla en
esta visita, la saludó efusivamente, ponderó públicamente el trabajo que ha
hecho hasta ahora y agradeció su esfuerzo y su dedicación por sacar adelante a
esta ciudad arrasada por tres meteoros: su pasado priista y perredista, Otis y
John.
De las acusaciones en su contra no se hizo ni una sola
mención. De hecho, con el simple gesto de invitarla, hizo que los bonos de
Abelina subieran desproporcionadamente, pues si alguna instancia sabe cómo se
manejan las cosas en los estados y en los municipios, ya sea a la luz ya sea a
la sombra, esa instancia es la federación.
Hoy, lunes 12 de mayo, los medios y las redes sociales siguen calladas en torno a este asunto. Y parece ser que así seguirán, porque parece ser que la orden viene desde arriba y que tiene un destinatario específico, la orden es: No quiero escándalos, y el destinatario es el grupo de los Salgados.
Abelina puede respirar tranquilamente hasta que nuevamente el desaforado ego de la gobernadora decida que es tiempo de volver a fastidiar a la contendiente más cercana a su papá o a cualquier candidato que éste imponga para pelear la gubernatura en el 2027.
Pero ahora los Salgado tendrán que lidiar con otros
problemas, el primero, es el hecho de que la presidenta está pendiente de sus
desórdenes, el segundo, es que, en caso de salir limpia de los procesos
iniciados, la imagen de Abelina crecerá enormemente y, el tercero es que con
ese crecimiento y el apoyo de otros políticos Abelina puede dar un salto
cuántico y dejar muy atrás a los Salgado.
Esta visión no es gratuita. Desde el inicio de su mandato se
veía que Abelina había sido apoyada para arribar a la alcaldía del municipio
más importante de la entidad como un contrapeso contra lo que se veía venir: la
asunción de Félix a la gubernatura.
Y Abelina, como contrapeso ha sabido hacer bien su trabajo,
aunque como alcaldesa no tanto, como lo hemos visto.
Este esquema, por supuesto ya había sido previsto por quien
puso a ambas funcionarias en sendos cargos, y lo creó con el fin de que
Guerrero no cayera en la anarquía ni bajo los caprichos de este imposible neo
cacique llamado Félix Salgado Macedonio.
MORENA, así, garantiza por ahora que el estado de Guerrero no
será presa de las ambiciones de otra familia megalómana.
Nos leemos en la crónica.